Contratar el primer Seguro de Decesos

Contratar el primer seguro de decesos puede suponer un verdadero acontecimiento si tenemos en cuenta las ventajas que este seguro conlleva. Contratamos unas coberturas realmente amplias con el seguro de muertos para el momento de nuestra muerte que aseguran además la tranquilidad a nuestros familiares.

Puede resultar difícil contratar el mejor seguro de defunción si tenemos en cuenta que las compañías aseguradoras de decesos en nuestro país ofrecen coberturas muy diferenciadas. Por eso los comparadores de seguros de decesosson una opción claramente ventajosa.

Contratar uno de los principales seguro de entierro en los buscadores supone encontrar el seguro de decesos que mejor se nos adapte en muy poco tiempo, y que cuente con las garantías y coberturas que necesitamos a la hora de sufrir cualquier imprevisto a lo largo de nuestra vida.

¿Qué es un Seguro de Decesos? y las ventajas que adquirimos al contratarlo

Cuando fallece una persona, a parte de los sentimientos que invaden a los familiares y allegados, empieza el momento de realizar los trámites correspondientes, con los gastos que estos pueden conllevar. Las gestiones con las diferentes administraciones o el pago del impuesto de sucesiones se suman al traslado del cuerpo del fallecido si la muerte ha tenido lugar fuera de su residencia habitual.

Es por eso que el seguro de decesos se sitúa como una solución para quien decide contratarlos, bien de forma particular o familiar, para cubrir los gastos que supone el entierro y los tramites ha realizar. El seguro de decesos cubre los gastos de sepelio y se encarga de realizar todos los trámites cuando el asegurado fallece, ayudando así a los familiares en esos momentos tan complicados.

Se contrata para dar un apoyo a los familiares realizando todos los trámites burocráticos del sepelio y evitando tener que pagar los gastos que se derivan de una defunción. Las coberturas del seguro de decesos no solo incluyen las gestiones administrativas, si no que, también incluyen el ataúd, coches de acompañamiento, servicios religiosos, capilla ardiente, sepultura e incluso hasta la repatriación si fuera necesaria.

Estas coberturas pueden variar dependiendo de la compañía aseguradora con la que se contrate la póliza, pero también de la localidad en la que el asegurado decida que se realice el entierro. Todas las coberturas suelen incluir servicios comunes pero otras se adaptan a las costumbres de la localidad donde se ha elegido realizar el servicio. El servicio fúnebre es una de las coberturas básicas de estos seguros, incluyendo el féretro, coche fúnebre, sudario y el acondicionamiento del cadáver, además de la inhumación o incineración del cuerpo. En el caso que se opte por la inhumación, estará cubierto el nicho o la sepultura, dependiendo del caso, mientras que en el caso de la incineración estaría cubierta la urna para las cenizas.